Seguro de vida: 5 cuestiones que debes valorar antes de contratarlo
El Seguro de Vida nació con vocación de ser un producto que proporcionara vocación de protección familiar. Hoy en día, abunda la gente que lo tiene contratado por imposición del banco de cara a firmar una hipoteca. Es por ello, que en ocasiones se percibe como un incómodo gasto de gran cuantía que lesiona la economía familiar. A partir de aquí, no son pocas las personas que sienten la tentación de reducir sus coberturas para obtener el precio más asequible posible. Sin embargo, si no se conoce bien este producto, se puede obtener un seguro cuya cobertura sea insuficiente para cumplir su finalidad. En el caso de la hipoteca, el seguro tiene la función de cubrir los gastos de ésta cuando fallezca un miembro de la unidad familiar que soporte su carga.
Tampoco parece lógico pagar de más, por un riesgo que desconocemos que vaya a ocurrir. El gasto es tremendo y en caso de no producirse el seguro habrá impactado desproporcionadamente en el gasto familiar.
¿Cual sería la solución?
Buscar el asesoramiento a un profesional. Los profesionales del mundo asegurador, además de poseer los conocimientos técnicos necesarios para asesorarle, le proporcionarán información ajustada a su situación particular. Finalmente, le ofrecerán varias opciones, perfectamente ajustadas a sus necesidades tanto en coberturas como en precio, entre las que podrá elegir libremente. Y todo ello sin coste para usted.
Sin embargo, le comentaremos algunas cuestiones que debería tener en cuenta a la hora de contratar un seguro de vida. Éstas no sustituirán la labor de asesoramiento del corredor, pero al menos le proporcionarán algo de luz acerca de este producto:
Si tiene una hipoteca
En caso de tener hipoteca, lo recomendable es cubrir el capital pendiente en caso de fallecimiento, con el objetivo de que nuestra familia no sufra las consecuencias de la pérdida de ingresos y quede sin capacidad de pagar la hipoteca. En caso de que la hipoteca esté repartida entre varios cónyuges, deberemos tener muy en cuenta el porcentaje de carga sobre las amortizaciones de cada uno.
Cubrir la hipoteca puede no ser suficiente
Puede que con el fin de cubrir todas las deudas en caso de fallecimiento, sea necesario incrementar el capital. Hay que tener en cuenta que muchos gastos, al margen de la hipoteca, se van a seguir manteniendo. Lo importante, como hemos comentado, es mantener el equilibrio entre ingresos y gastos de la unidad familiar. Por tanto, os recomendaríamos que el seguro cubriera además la cantidad equivalente a 2 o 3 años de ingresos de la persona asegurada. Esto asegura el tiempo mínimo necesario que podría necesitar una familia para reorientar los gastos, ya sea ajustándolos o buscando la forma de aumentar los ingresos.
Ten muy en cuenta a tus hijos
Uno de los objetivos de una unidad familiar, es el de asegurar protección, bienestar y futuro a los hijos. Por tanto, puede ser interesante aumentar la cobertura del seguro con el fin de asegurar su acceso a estudios universitarios o de posgrado en caso de fallecimiento de uno de los padres.
Tener en cuenta todas las cabezas de la unión familiar
Asegurar sólo al padre, o sólo a la madre, es contratar un seguro de vida a medias. A fin de cuentas, de lo que se trata de es de cubrir una eventualidad, que puede sucederle a cualquiera de los miembros de la unidad familiar. Si en una pareja los dos miembros trabajan y aportan su salario a cubrir los gastos ¿no es lógico que cada uno tenga su seguro de vida?
Ten muy en cuenta tu edad
En muchos seguros de vida la prima no es nivelada, es decir, se va ajustando con los años a la edad del asegurado. Esto significa que si contratas un seguro de vida con 30 años, la prima irá aumentando con el tiempo conforme te hagas mayor, puesto que el riesgo de fallecimiento aumenta con la edad. Sin embargo, también es posible ir revisando los capitales e ir nivelando esa prima de forma que el seguro se ajuste a nuestras necesidades. Un ejemplo: dentro de 20 años, el capital pendiente de nuestra hipoteca será mucho menor, de modo que podremos ajustar los capitales de nuestro seguro de vida y bajar la prima.
